Nunca debemos avergonzarnos de nuestras lágrimas, porque son la lluvia que limpia el polvo cegador de la tierra a que a veces cubre y mancilla nuestro endurecido corazón.
Charles Dickens, Grandes esperanzas.
En la anterior tira empezaban las melodramáticas andanzas de Kalaverito.
¿Se han acabado los doritos? Eso es señal en tus cómics que la sesión se acaba.
¡Exacto! Llevan mucho rato jugando.
A ver, que Bifidus roba por convicción religiosa, no para gastarselo en alcohol.
Fijo que Almas para Khal Purnio es el Vingardium leviosa se ese mundo.
A la última frase de Norma se le ha escapado el símbolo de exclamación del final (o se ha colado el del principio)
Arreglado, ¡gracias!
Adoro el detalle de que Padme ponga su voz de Kalaverito.
Buen movimiento, y se nota el cambio de DN!